CRUCERO A.R.A. LA ARGENTINA
Por Fernando Repetto
El que para muchos fue el mejor y más equilibrado crucero
argentino llevó, paradójicamente, una existencia pacífica como
buque escuela y embajador de Argentina por todo el planeta.
En efecto, el crucero La Argentina nació como respuesta al
requerimiento de un buque escuela realmente moderno y semejante a
las unidades con las que se encontrarían los futuros oficiales
argentinos, algo que no podía ofrecer el barco que hasta ese
momento se empleaba para la instrucción, el viejo crucero
acorazado Pueyrredón. La experiencia de los Almirante Brown
llevó a Argentina a repetir la aventura de solicitar en Europa
la conversión de un modelo autóctono según sus propios
requerimientos recayendo la elección en los astilleros Vickers
Armstrong de Gran Bretaña, corría el año 1935.
Estructuralmente, el buque era una versión modificada de la
clase Arethusa, una serie de 4 pequeños cruceros ligeros
británicos de 5000 toneladas y armados con 6 cañones de 152 mm.
Era mucho más pesado (7500 toneladas a plena carga) y largo (165
metros de eslora) que los Arethusa, y disponía de una mejor
habitabilidad, contemplándose el alojamiento de hasta 60
cadetes. Sus niveles de protección eran similares (76 mm. de
faja vertical y en la torre de mando, y 51 mm. de cubierta y
torres), pero su armamento era mucho más potente al ser
sustituidas las torres dobles originales por los montajes triples
que montarían las inmediatas series de cruceros ligeros
británicos. Incluía también 4 cañones bivalentes de 101/50 mm
en montajes simples y 12 ametralladoras antiaéreas de 25 mm.,
además de los típicos tubos lanzatorpedos (6, en dos montajes
triples) y las instalaciones necesarias para operar con hasta dos
hidroaviones Walrus Sea Gull.
La maquinaria del La Argentina era menos potente, ya que su
función primaria no iba a ser el combate naval (aunque en esta
faceta estaba a la altura de cualquier crucero ligero europeo).
Ello, unido al aumento del desplazamiento, significó que era
casi tres nudos más lento que los Arethusa. Tres turbinas
Parsons movían sus tres hélices, con una potencia máxima de
54000 hp. Como máximo, el buque daba 305 nudos. A 20
nudos, el crucero gozaba de una autonomía de 15000 kilómetros,
cifra realmente respetable.
El barco fue entregado el 31 de enero de 1939, y hasta marzo no
llegó a Argentina. Treinta y cinco años de servicio le
esperaban.
Aunque fue encargado como buque de instrucción, la capacidad de
combate del La Argentina nunca se descuidó y, al igual que los
cruceros de origen italiano, fue cuidadosamente actualizado para
mantener su vigencia tanto como fuese posible. Fue el primer
buque Argentino en recibir un radar de navegación, un Marconi
sobre el mástil proel, en 1946. Y gozó de un idéntico
reemplazo de su artillería antiaérea (1949) al de los otros dos
cruceros: los 4 cañones de 101 mm. se sustituyeron por montajes
dobles de 40 mm. en idéntico número, y las ametralladoras de 25
mm. por 6 Bofors 40 mm. simples. En los años 50 sus sensores se
vieron notablemente mejorados, entre otras cosas con un moderno
(para la época) CIC, un radar Raytheon Pathfinder, un radar de
descubierta SA y otro para la dirección de tiro Mk.8.
Tras múltiples cruceros de instrucción y vueltas al mundo, el
noble crucero La Argentina fue retirado en 1974.
El modelo
Cuando comencé con este hobby, siempre estuvo en mi mente el
construir este Crucero del que mi padre fuera su oficial más
joven el su vuelta al mundo en el año 1950 y su comandante en el
año 1965..
Al encarar su construcción, lo primero que realicé fue una
investigación en materia de planos y fotos de la nave, para ello
recurrí a la página Web de Histamar, lo que me permitió
acceder a unos planos que el Museo Naval de la Nación ubicado en
el Tigre vendía de la nave mediante un formato en CD. La escala
de 1:130 se ha tomado en consideración básicamente la longitud
de mi baúl del auto, a los efectos de poder transportarlo sin
mayores inconvenientes.
Al igual que mi primer obra el HMS Dreadnought, el
casco se encuentra trabajado desde la línea de agua -water
line-, el mismo fue realizado en poliestireno expandido de alta
densidad, pero de 10 mm de espesor, ya que el casco en su manga
es más delgado que el acorazado mencionado. Se le realizaron
costillas para darle mayor rigidez al casco, siendo el fondo del
mismo de 10 + 10 mm de espesor, trabajo que me llevó en su
conjunto un máximo de aproximadamente 20 minutos.
Una vez terminada esta etapa, se le coloca el eje del motor,
montado sobre un triángulo de madera de pino perforado, para
luego montarlo con tornillos desde el interior del casco. Una vez
concluidos dichos trabajos, procedemos a pegar capas de madera
balsa de 2 mm a los efectos de darle la forma clásica a la proa
de los Cruceros ingleses de aquella época, terminando el trabajo
mediante capas de enduído plástico y su correspondiente lijado.
Para la terminación del casco, se embuten los
llamados ojos de buey, utilizando aquellos bujes de
bronce que vienen generalmente como accesorios de los servos para
radio control, otorgándole una terminación realmente excelente
al casco. La pintura aplicada es del tipo al agua, pero
resistente a la misma.
La cubierta de madera fue realizada en fibrofácil, marcando con
birome negra las tablas características de la cubierta,
barnizando posteriormente con 5 manos ambas caras de la misma. La
superestructura se encuentra realizada en acrílico de alto
impacto, de 1 y 2 mm de espesor. Los botes y lanchas salvavidas
se realizaron a partir de modelos de juguetes plásticos que se
encuentran generalmente en casas de cotillón, los cuales se
vende surtidos para su uso en piñatas. Por último, el buque
posee iluminación del puente de mando y sus tres pisos de la
superestructura. El hidroavión puede ser retirado de su
catapulta, las tres torres principales y sus cañones están
preparados para su elevación en forma mecánica
cuando las mismas giran a 90 º . Asimismo posee un
dimer para controlar la velocidad del radar ubicado
en el palo mayor
El modelo cuenta para su propulsión de un motor mabuchi de 12 v,
extraído de un compresor para neumáticos de automóvil,
alimentado con una batería de 6 volt y 4 amperios, obteniéndose
una autonomía de aproximadamente de una hora y treinta minutos a
velocidad crucero; asimismo posee un speed control que permite la
marcha hacia adelante y reversa, un servo para el único timón y
un receptor marca GWS de doble conversión, el cual le da un gran
alcance al modelo de aproximadamente 600 / 800 mts.